Reseña de «Partir».

Título: Partir.

Autora: Lucía Baskaran.

Editorial: Expediciones Polares.

Número de páginas: 204.

Encuadernación: tapa dura.

Precio: 21’50€.

Sinopsis:

Partir es una historia sobre la juventud, sobre cómo matar la ingenuidad postadolescente y morir un poco, para luego resucitar hermosos. A través de la protagonista, la autora nos sumerge en un relato descarnado en primera persona. Desde sus personajes —jóvenes locos, temblorosos, que quieren descubrir el mundo y hacerlo estallar en pedacitos— hasta sus escenarios —Madrid, París, el ambiente universitario, ese sabor fresco, moderno, duro y urbano—, la historia va tomando fuerza y realidad y nos invita a seguir leyendo con miedo y emoción.

Un libro comparable, entre otros, a La campana de cristal, de Sylvia Plath, o las primeras novelas autobiográficas de Amélie Nothomb.

Opinión personal:

Lo que más me ha gustado de la historia ha sido lo rápido que se lee (en mi caso me duró menos de veinticuatro horas). Supongo que esto se debe a su corta extensión y a que utiliza un lenguaje sencillo y «fresco», sin florituras. Se nota que está escrito por una persona joven porque ha sabido plasmar el mundo académico bastante bien, así como las inseguridades y los miedos que normalmente solemos tener aquellos que estamos entre la veintena y la treintena.

En la historia se mezclan dos tramas: el pasado —donde la protagonista, Victoria, tiene diecisiete años y empieza a estudiar arte dramático en una academia de otra ciudad— y el presente —donde se nos presenta a una Victoria más madura y realista—.

Una de las cosas que más me llamó la atención fue lo ingenua y fantasiosa que es la protagonista en su época de estudiante y cómo se va llevando pequeñas decepciones poco a poco. Creo que esas fantasías que tiene podría tenerlas cualquier persona joven, lo cual hace que el lector empatice con Victoria.

Otro punto a su favor es que trata el feminismo sin utilizar discursos morales baratos para «adoctrinar» a la gente. El feminismo que muestra el libro está acorde con la historia, es decir, no es un discurso que hace la autora apropósito como «moraleja». No escuchamos su voz a través de las palabras, pero sí que comprendemos el mensaje gracias al entorno que envuelve a la protagonista y que la hace abrir los ojos y madurar. El feminismo está bien integrado en la novela. (No sé si me estoy explicando bien, pero espero que quede claro).

Con respecto a los personajes secundarios, decir que no me han parecido relevantes en la narración. Supongo que se debe a que la historia es muy corta y sencilla y que toda la atención se centra en Victoria.

La autora también trata algunas enfermedades mentales (depresión, Trastorno Límite de la Personalidad…), los abusos sexuales y los problemas familiares, pero no profundiza en ellas y se quedan en el aire. Parecen más algo anecdótico que algo importante. Además, he visto algunos errores ortográficos que podrían haberse evitado con una corrección un poco más exhaustiva.

En resumen: teniendo en cuenta que es su primera novela, creo que su calidad es aceptable. Un libro perfecto si quieres disfrutar de una lectura rápida.

Frase destacada:

«Lo que no se nombra no existe o, peor aún, se lo llama con un nombre que no tiene nada que ver con lo nombrado.»

Puntuación: 7/10.